En la sociedad occidental actual, uno de los nutrientes que más alarma social genera es la grasa. Es necesaria, en cierta medida, para el correcto funcionamiento del organismo, pero no todos los tipos son iguales.
Porque para mantener el peso perdido, se han de modificar y/o mejorar ciertos hábitos. Teniendo en cuenta que cada persona es única y requiere un enfoque personalizado para conseguirlo.
Te guío y ayudo, ya que en este proceso pretendo que los cambios realizados se vayan interiorizando y formen parte de tu rutina. Para ello la empatía y la educación nutricional son la base.
Mis objetivos son: Que disfrutes comiendo alimentos saludables, que lo hagas de forma consciente, y que sepas organizarte en tu día a día. En definitiva, te enseño a comer mejor y a coger buenas costumbres. Teniendo en cuenta que también son importantes: la práctica de ejercicio físico, descanso adecuado, controlar los niveles de ansiedad o estrés…
No solo se trata de bajar peso, el concepto va más allá de subir a una báscula. Cambiar y mejorar aspectos del día a día, contribuye a aumentar la calidad de vida y prevenir o mejorar ciertas enfermedades, problemas óseos, síntomas que se producen por una incorrecta alimentación (hinchazón, digestiones pesadas…)
Cuídate, tu cuerpo lo agradecerá.
En la sociedad occidental actual, uno de los nutrientes que más alarma social genera es la grasa. Es necesaria, en cierta medida, para el correcto funcionamiento del organismo, pero no todos los tipos son iguales.
Cuando una persona comienza a hacer una dieta, está rodeada continuamente de tentaciones, pero con esfuerzo y sacrificio, la recompensa vale la pena.
Por fin podemos hacer un viaje! Aunque tener diabetes no incapacita para evadirte de tu rutina, sí que tienes que tener presente algunos aspectos para que disfrutes del viaje sin complicaciones.